¡El sábado 21 de enero toca competición! Por ello, Takizawa sensei ha dedicado parte de este curso al arbitraje.
Antes de eso, un calentamiento como debe ser, con suburi y explicación de todo lo que tendría lugar durante la mañana.
Una vez hecho eso, el maestro nos pidió que nos pusiéramos en filas de 5 personas. De esta forma, trabajamos con los shinais colocados en el lateral técnica de men: varios men seguidos, después varios men seguidos con el último motodachi acercándose (como el día anterior) y por último varios men pequeños a distancias muy muy cortas. Es importante coordinar bien el cuerpo para que el movimiento del pie derecho coincida con el golpe, y la espalda no se nos vaya encorvando por no calcular bien la distancia.
A continuación comenzó la práctica de arbitraje. Divididos en grupos por niveles (2º kyu e inferiores, 1º kyu y Shodan, y 2º Dan y superiores), debíamos combatir 3 personas a la vez, y sólo el primero que metía un punto se podía quedar en el área de combate para seguir luchando. Los golpes desde atrás no valían, pero un men lateral sí, por lo que ya advirtió Takizawa sensei que tendríamos que estar muy atentos, ya que el men impide la visión lateral.
Antes de comenzar con el ejercicio en sí, el maestro fue explicando, a modo de preguntas y respuestas, qué era lo importante para meter un punto en competición. Lo primero, un alumno ya adelantó el concepto de kikentai no-ichi: que la energía, el cuerpo y la espada "sean uno", o actúen simultáneamente, de forma coordinada. Nuestro kiai, nuestra postura de cuerpo (¡los pies y caderas son primordiales, bien rectos!) y el manejo de la espada deben ser correctos.
Por supuesto, debemos golpear en el sitio correcto, el maestro indicó muy bien qué lugar de las protecciones son los adecuados. Pero en cuanto al manejo de la espada: debemos golpear con el monouchi y tener muy en cuenta la orientación del filo al golpear uno u otro sitio.
¡Insiste en la orientación del cuerpo! Y yo también: rectos, no ladeados, porque esto hará que acabemos encorvando la espalda y no salgamos rápidos. Debemos empujar de la cadera para llegar rectos.
Y por último el concepto de zanshin: esto debe empezar antes del golpe, debemos mostrar mucha atención para generar una buena oportunidad de punto. Y por descontado, una vez golpeemos no termina ahí la cosa, debemos seguir prestando la máxima atención hacia el oponente, controlándole con nuestra mirada, guardia y distancia.
Los combates se sucedían muy rápidamente: teníamos la presión de que, aunque no fuéramos golpeados, si un compañero lo hacía sobre el otro antes que tú, te quedabas fuera. Adrià consiguió mantenerse ahí un par de veces, ¡menuda energía! Algunos compañeros rápidamente aprovechaban para golpear al compañero con el que entraban al área de combate. De hecho, yo hice eso pero desgraciadamente el árbitro estaba todavía atento al anterior punto. De todas formas fue muy entretenido.
Finalmente, se eligió a un representante de los tres grupos citados y combatieron entre ellos. El de mayor nivel debía puntuar 3 veces, el intermedio 2, y el de menor 1 vez. ¡Y ganó el chavalín del grupo de kyu!
Una vez terminamos el ejercicio, volvimos a combatir, de forma libre, con maestros u otros compañeros, de cara a preprarar la competición de la tarde.
Comimos rápidamente una ensalada de pasta, y a preparar tranquilamente todo: vestimenta, shinai, concentración mental... ¡para estar a tope! Durante este tiempo debíamos pesar nuestros shinai:
Nuestros compañeros de Madrid fueron muy amables y nos permitieron calentar con ellos. Aquí están los de Barcelona, que jugaban en casa:
¡A formaaaar! 
Como nos explicaron aquí, la competición era por equipos de 3, y debíamos combatir hasta 3 minutos, al primero de dos puntos, que es lo habitual.
¡Y a combatir! Tenemos aquí un panorama del combate de Javi, que buscaba estrenar su marcador:
Adrià como diciendo... jo, ¿por qué paran el combate?
Y por último Xabi buscando un hiki: pero no, no entran todavía.
Contra el primer equipo quedamos en tablas, y contra el segundo equipo perdimos, por lo que no pudimos pasar de ronda. ¡Ooooooh! Pero Javi fue soltándose mucho en el segundo combate y pudo probar varias veces a hacer técnica de do, ¡que seguro que irá mejorando!
Por lo menos tuvimos la suerte de enfrentarnos a ese segundo equipo, que de hecho fue el campeón: un grupo de Berlín formado por compañeros de diferente procedencia, que han acabado viviendo una temporada en Berlín y siguen entrenando allá con Aoki sensei. Ya véis, muy internacional el asunto. Una vez fuera, comentamos con Julio las jugadas, aconsejándonos para futuras competiciones:
La final fue entre ese equipo de Berlín y uno de Ryoshinkai de Barcelona. A punto estuvieron de ganar los barceloneses, fue una final muy interesante con puntos por ambos lados, pero el último combate inclinó la balanza a favor de los berlineses.
En total hubo bastantes más de 100 participantes, así que fue una competición larga que terminó casi a las 21h. A esa hora se entregaron los premios y la gente se preparó para la Sayonara party.
No hay comentarios:
Publicar un comentario